BMW, Mercedes y Stellantis rechazan aranceles a autos eléctricos chinos
Una guerra comercial que preocupa a Europa
La reciente decisión del gobierno estadounidense de cuadruplicar los aranceles a la importación de vehículos eléctricos chinos ha generado un fuerte rechazo entre los principales líderes de la industria automotriz europea.
¿Medidas exageradas para fabricantes chinos?
Oliver Zipse, CEO de BMW, durante la presentación de resultados trimestrales de la compañía, criticó duramente la medida: “Los aranceles son medidas proteccionistas que solo nos perjudican a nosotros mismos”, afirmó.
Zipse minimizó la presencia actual de marcas chinas en el mercado europeo (menos del 1%) y calificó los temores de algunos fabricantes europeos como “exagerados”.
Fabricantes alzan la voz por restricciones impuestas
Ola Kaellenius, CEO de Mercedes-Benz, también se mostró en contra de las restricciones al comercio con China.
“Estamos monitoreando de cerca el impacto de estas medidas en nuestras cadenas de suministro y mercados de ventas”, señaló. Kaellenius recordó que China sigue siendo el mercado más importante para el grupo.
Carlos Tavares, CEO de Stellantis, enfatizó la limitada oferta de autos chinos en el mercado estadounidense, razón por la cual su grupo no ha entrado en ese segmento.
“Los aranceles no son la solución a largo plazo”, afirmó Tavares, quien también criticó el proteccionismo estadounidense en contraste con la postura más abierta de Europa hacia la industria automotriz extranjera.
Incrementa presencia de autos chinos en el mercado
Sin embargo, Luca de Meo, CEO de Renault, adoptó una postura diferente. En una carta a los votantes europeos, Meo instó a apoyar al sector automotriz del continente y propuso que los fabricantes unan fuerzas para enfrentar la competencia china.
La disparidad de opiniones entre los líderes europeos refleja la complejidad del panorama global automotriz. La creciente presencia de China en el mercado de vehículos eléctricos genera tanto preocupación como oportunidades para las empresas europeas.
Queda por ver cómo se desarrollará esta situación en el futuro y qué medidas tomarán los diferentes actores para adaptarse a las nuevas dinámicas del mercado.
