En los últimos años, expertos en tecnología han adoptado BYOD Bring Your Own Device (Trae tu propio dispositivo) de manera vertiginosa de tal suerte que pareciera que ya es un estándar a nivel corporativo; incluso observadores en la industria creen que llegara un momento en que BYOD se vuelva obligatorio de modo que se exija a los empleados llevar sus teléfonos inteligentes y tabletas como condición para ser contratados por parte de las empresas, pero, ¿Qué tan cierta es la realidad contra las buenas intenciones del BYOD? Analicemos el siguiente informe generado recientemente y en este mismo año.
CompTIA (Asociación de la Industria de Tecnologías de Cómputo) realizó una encuesta en el segundo trimestre del año a 400 ejecutivos de TI y negocios, la cual arrojo luz sobre el estado no tan favorable de BYOD: dependiendo del tamaño de la empresa, entre el 39% y el 51% de los encuestados no están aplicando BYOD en absoluto. Seth Robinson, director de análisis de tecnología en CompTIA indica que BYOD es popular pero que todavía existen muchas empresas que tratan de controlar el despliegue y la gestión de dispositivos móviles. Por su parte, Gartner ha mirado con buenos ojos a BYOD dándole su sello de aprobación y realizando la predicción de que para el año 2017 la mitad de las empresas contrataran empleados que traigan sus propios dispositivos para trabajar.
CompTIA afirma que BYOD es rechazado por una de cada dos empresas y que no todo es miel sobre hojuelas, que los millones de dólares en ahorro y predicciones benignas no es algo que realmente llegue a cumplirse. Si nos detenemos a analizar por un instante las experiencias y problemas a los que se han enfrentado las empresas pioneras en adoptar BYOD en los 2 años anteriores, los resultados de la encuesta comienzan a tener sentido, y por ende, las compañías que operan como observadores y se enteran de los tropiezos de los primeros adoptantes, sin duda lo piensan dos veces antes de abrazar BYOD.
Temas pendientes
- Se suponía que sacaría a TI de la compra de dispositivos móviles. Con ello el ahorro de una cantidad de dinero considerable. Compañías como VMware afirmaron que BYOD les ahorro miles de dólares, pero, Aberdeen Group y otras corporaciones se apresuraron a poner en tela de juicio los beneficios aparentes, indicando que BYOD está plagado de costos ocultos tales como el procesamiento de informe de gastos, gastos de empleados en juegos, teléfonos zombis que atacan el presupuesto móvil, conversión desordenada de la responsabilidad el servicio telefónico, entre otros. Sumando estos conceptos, podría resultar más costoso mantener estos dispositivos personales que realizar las compras por parte de las empresas, en otras palabras, la promesa de ahorro de costos ya no es algo seguro.
- Se suponía que haría a la fuerza laboral (el trabajador) más feliz. Después de todo un empleado que antes portaba un teléfono personal y uno empresarial ahora puede hacer todo con uno solo. En un principio, las empresas reportaron un amento de satisfacción en el empleado según las encuestas anuales, pero, luego se involucraron los abogados, en un esfuerzo por proteger los datos corporativos en los teléfonos y tabletas BYOD, comenzaron a redactar las políticas de usuarios, llenas de jerga legal que favorece el derecho de la empresa a monitorear, acceder y revisar los datos que manejaban, incluso ajenos a la empresa (personales). En este contexto las expectativas del empleado con respecto a la privacidad no se cumplieron, incluso algunos empleados que no informaron de teléfonos BYOD extraviados, fueron despedidos de manera inmediata por violar supuestamente las políticas BYOD internas. Después de estos incidentes, muchos empleados se han vuelto cautelosos de participar en un programa BYOD que, irónicamente fue creado para hacer la vida más fácil al empleado.
- Se suponía que haría más productiva a la fuerza de trabajo. Tener un teléfono en todo momento, incluso después de la noche o los fines de semana y vacaciones, significa que el empleado va a hacer más trabajo y consecuentemente será más productivo, ¿cierto? La verdad es que este tipo de aumento en la productividad es difícil, sino imposible de medir. Mientras que la movilidad y las aplicaciones pueden aumentar la productividad de los trabajadores, BYOD en la productividad no es tan clara. La encuesta de CompTIA entregó una bomba: Menos de la mitad de las empresas que ofrecen BYOD tuvieron la sensación de que esta contribuye a la productividad de los empleados.
- Se suponía que haría la vida más fácil para el departamento de TI. Pronto llegaron los problemas de seguridad y cumplimiento de BYOD que cegaron a los directivos. Quizás, la razón por la que las compañías se han mantenido al margen ha sido el riesgo de pérdida de datos. Recientemente, Centrify encuesto a más de 500 empleados de medianas y grandes empresas y encontró que casi la mitad tiene más de seis aplicaciones de terceros en sus dispositivos BYOD, como almacenamiento de archivos personales en la nube, y más del 15% ha tenido su cuenta personal o la contraseña comprometida.
Con tantas armas cargadas dirigidas contra BYOD: mucha complejidad, costos ocultos, riesgos de seguridad, problemas de privacidad y tan pocos beneficios, no es de extrañar que las empresas están poniendo obstáculos. Así que ¿a dónde va BYOD desde aquí? ¿Estamos acercándonos a un punto álgido para la adopción de BYOD? En los próximos años con seguridad, obtendremos la respuesta.
Via Cio.com
Me pregunto sobre algunas noticias referentes al mercado y condiciones mexicanas aqui no se aplica el BYOD
Asi es Jose, en Mexico la aplicacion a nivel empresarial es minima y ademas no existen estudios que permitan conocer el estado actual.
Me parece una tontería jaja. Ya veremos si vs creciendo.